El Gobierno lanzará hoy la nueva etapa de Precios Justos en el Centro Cultural Kirchner (CCK), que contará con una canasta de productos congelada, en otro intento por frenar la escalada inflacionaria.
El plan oficial sumará 49.832 artículos de hasta 15 sectores -alimentos, higiene, limpieza, combustible, indumentaria-, que solo podrán subir hasta un 3,2% mensual.Con respecto a los controles, el Gobierno busca alejarse de las fiscalizaciones presenciales e implementará un software de control que acordó con Amazon y Arsat que servirá para monitorear el cumplimiento de las pautas de aumento de los productos que se encuentran en los supermercados para detectar si alguno aumentó por encima de los previstos.
La fiscalización digital va a funcionar de dos maneras. Por un lado, tomará los datos del sistema de precios (SEPA) que las cadenas de supermercados comparten a diario con la Secretaría de Comercio. Y les permitirá conocer cada día qué precios subieron por encima de la pauta de 3,2%. Esto es para los productos de consumo masivo que forman parte del acuerdo y tendrá una capacidad para relevar más de 3,6 millones de productos. Se tomarán datos de 943 sucursales de 13 cadenas de todo el país.
Se adelantó además que seguirá funcionando una lista de cerca de 2.000 artículos de consuno masivo -alimentos, bebidas, higiene y limpieza- con precios fijos. Como cinco meses es un período muy largo para mantener esos precios, esa lista se irá renovando con productos que entran y salen de acuerdo a los pedidos de las empresas. Cuando un producto se retira de la lista puede tener un aumento mayor al 3,2% -podrá llegar a 9% en algunos casos- para compensar su retraso frente a la inflación.
Con todo, en el Gobierno reconocen que hoy la fortaleza del acuerdo está en el sendero de aumentos del 3,2% y que la canasta de precios fijos, que es muy pequeña frente a la cantidad de productos que existen en el mercado, es menos relevante.