Un decreto del Gobierno marcó un antes y un después en la historia de las monedas digitales en el país. ¿Qué se puede esperar con esta nueva medida? Todo lo que debes saber, a continuación.
Esta alternativa financiera nació de la mano de las nuevas tecnologías y es una de las opciones más elegidas por los ahorristas e inversores para hacerle frente a factores como la devaluación del peso o la inflación que se vive mes a mes.Durante mucho tiempo se especuló sobre qué ocurriría con las criptomonedas en Argentina y si serían alcanzadas por nuevos impuestos o extensiones de gravámenes ya establecidos. Ahora el misterio empezó a develarse: mientras muchas personas buscan cómo comprar Bitcoin, el Gobierno estableció que las monedas digitales deberán pagar el mismo impuesto a los créditos y débitos bancarios, conocido como impuesto al cheque.
El decreto publicado el miércoles 17 de noviembre en el Boletín Oficial y que lleva la firma de Martín Guzmán, actual ministro de Economía abre un nuevo debate sobre la rentabilidad de estos activos. Ahora bien, cabe aclarar que la normativa explica que “las exenciones previstas en este decreto y en otras normas de similar naturaleza no resultarán aplicables en aquellos casos en que los movimientos de fondos estén vinculados a la compra, venta, permuta, intermediación y/o cualquier otra operación sobre criptoactivos, criptomonedas, monedas digitales, o instrumentos similares, en los términos que defina la normativa aplicable”.Esto quiere decir, en otras palabras, que el impuesto no recae sobre el inversor, sino sobre las empresas intermediarias, conocidas como Proveedores de Servicios de Pago (PSP), pertenecientes al cada vez más pujante y creciente sector Fintech. Desde el Gobierno afirman que es una medida “prudente” y equitativa para el resto del sistema financiero, apuntando a generar un “sendero fiscal sostenible en el mediano plazo”.
Además, se busca implementar el programa “Transferencias 3.0”, en el cual se busca propiciar la interoperabilidad para los pagos mediante códigos QR. El texto apunta a una armonización entre los bancos y las empresas del sector Fintech. De esta manera, todos los códigos QR del país deberán aceptar pagos con billeteras electrónicas de todo tipo, incluidas aquellas que operan con criptomonedas. El máximo de comisión cobrada no puede superar el 0,8%.
Esta medida se suma a otras similares que ya se habían aplicado a personas jurídicas que utilicen billeteras virtuales y fintech, equiparándolas a las cuentas en bancos tradicionales. Al igual que sucede en el resto de la región, esta medida busca fomentar los pagos electrónicos y desalentar los pagos en efectivo para alcanzar una mayor formalidad en diversos sectores económicos.
A ello hay que sumarle que desde el Gobierno Nacional se muestran optimistas en torno a la recuperación económica luego de los efectos adversos generados por el Covid-19 desde principios de marzo del 2020. Con un clima de crecimiento en puerta, una economía más transparente y registrada puede ser la puerta de entrada a una mejor distribución de ingresos.